Este es el lugar donde el cielo, el mar y la sierra se unen. Se trata de nuestra hermosa sierra algarvia, en concreto, Malhado do Judeo, la pequeña tierra donde nacieron mis bisabuelos.
Desde pequeña visito estos caminos con mis abuelos. Todos los veranos hacemos picnics y vamos a visitar a familiares mayores que todavía viven allí. Mi abuela me cuenta historias de cómo los judíos huían de los moros a las montañas y al parecer, por eso, ese pueblo se llama Malhado do Judeu.
Cuando yo era pequeña, mis tíos tenían una mula que se llamaba Branquinha, porque era de color blanco. Yo siempre le pedía a mi abuelo que me subiese a ella y él me llevaba de paseo por la sierra. Me encantaba aquello, me sentía muy feliz y es uno de los mejores recuerdos que tengo en la sierra con mi familia.
Cuando vamos de paseo por la sierra, me siento siempre como si estuviese en casa.
Cuando vamos de paseo por la sierra, me siento siempre como si estuviese en casa. Es el lugar donde me siento más tranquila y feliz. Creo que cuando estamos en contacto con la naturaleza hay algo casi sobrenatural que nos calienta el alma. Es un sentimiento indescriptible, pues desde la sierra tenemos una visión maravillosa del mar, de la naturaleza y del cielo que parecen unirse casi como en una cuadro. Escuchamos el canto de los pájaros y olemos el dulce aroma de las flores en el aire. Si estas no son las cosas más increíbles de la vida, no sé cuales podrán ser.
Superletra U 2022
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